Las mascarillas faciales de FREEMAN

Estoy de SORTEOS: Farmatis

¡Hola chicas! ¿Qué tal? ¿Os gustan las mascarillas faciales? A mí sí. :-) Por eso cada semana tengo mi “momento mascarilla” cuando disfruto de ellas. Me encanta aplicarlas, acostarme, relajarme escuchando mi música favorita y disfrutar de este momento especial dedicado solo a mí misma. Es como una mini sesión de SPA en casa. Además me gusta buscar nuevas mascarillas y descubrir sus propiedades y beneficios para mi piel. Hoy quisiera hablar sobre dos mascarillas faciales de FREEMAN, una marca estadounidense que conocí hace no mucho y que me ha gustado bastante. Las mascarillas en cuestión son: la Mascarilla de Carbón y Azúcar Negro y la Mascarilla Purificante Palma de Açai.

Antes de presentaros más detalladamente estas mascarillas, me gustaría comentaros que los productos de FREEMAN se venden en los centros de estética y peluquería DEPILINE, que distribuyen los cosméticos de esta marca en exclusiva a nivel nacional. En los centros DEPILINE nos ofrecen servicios de depilación con cera, fotodepilación, tratamientos faciales y corporales, peluquería y solárium. DEPILINE es una franquicia con más de 70 establecimientos en España y aquí podéis buscar vuestro centro más cercano. También os dejo el enlace a su tienda online por si queréis curiosear un poco y ver todos los productos que tienen en venta.

Foto: Depiline

Y tras esta corta introducción, pasamos a las mascarillas de FREEMAN que he probado.

Descripción de los productos:

La Mascarilla de Carbón y Azúcar Negro (Facial Polishing Mask Charcoal & Black Sugar) es una mascarilla de doble acción: purificante y suavizante. Se trata de una exclusiva mascarilla exfoliante que realiza dos funciones para desintoxicar la piel. Primero, el Carbón purificador activado naturalmente absorbe la grasa e impurezas sin resecar la piel. Luego, el Azúcar Negro ayuda a exfoliar las células muertas que opacan la piel para darle suavidad y claridad. El resultado es una piel más luminosa  que puede respirar, libre de polución y suciedad. La mascarilla es ideal para todo tipo de piel.

Como ya he dicho, entre sus principios activos destacan:

-    Carbón activado - un gran aliado para la desintoxicación de la piel; purifica y ayuda a absorber la grasa.

-      Azúcar negro - ayuda a exfoliar las células muertas de la piel proporcionando suavidad y claridad.

Además la mascarilla contiene muchos extractos de plantas y frutas. Os dejo todos los ingredientes de este producto.

La Mascarilla Purificante Palma de Açai (Facial Purifying Clay Mask Açai) extrae las impurezas de la piel, limpia los poros obstruidos y deja la piel suave. Es ideal para todo tipo de piel.

Esta mascarilla es una solución rápida para combatir la opacidad de la piel gracias a la acción de una mezcla de 8 antioxidantes que protegen contra los agentes externos neutralizando el daño ambiental y revitalizan la piel aportándole luminosidad. Son los siguientes antioxidantes: açai, arándanos rojos, arándanos azules, goji, mango, mangostán, noni y granada.

La mascarilla contiene también la arcilla blanca (caolín) que al absorber la grasa extrae las impurezas de la piel y limpia los poros tapados. Os dejo todos los ingredientes de esta mascarilla.

Ambas mascarillas no han sido testadas en animales.

Modo de empleo:

La Mascarilla de Carbón y Azúcar Negro: Aplicar en la cara y el cuello evitando el contacto con los ojos. Dejar de 5 a 7 minutos y luego masajear cuidadosamente durante 1 a 2 minutos. Al final enjuagar con agua tibia. Utilizar dos veces por semana o tan a menudo como sea necesario.

La Mascarilla Purificante Palma de Açai: Aplicar la mascarilla sobre la cara y el cuello, evitando el contacto con los ojos. La dejamos secar y enjuagamos con agua tibia. Utilizar dos veces por semana o tan a menudo como sea necesario.

Formatos y precios:

Ambas mascarillas se venden tanto en formato de tubo de 150 ml como en un sobre monodosis de 15 ml. La mascarilla en tubo cuesta 5,90 euros y la en sobre – 1,75 euros.

Foto: Depiline

Las  dos caducan en 36 meses tras su apertura. Os recuerdo que las mascarillas de FREEMAN las podemos encontrar en los centros DEPILINE o en su tienda online.

Foto: Depiline

Mi opinión:

La Mascarilla de Carbón y Azúcar Negro es de color negro y tiene un olor suave, bastante fresco y muy agradable para mí. Su textura se parece más a una textura de un exfoliante que a una textura de una mascarilla, ya que contiene muchos granulitos de azúcar de tamaño medio.

Esta textura al principio parece compacta, pero al aplicarla sobre la piel pierde su homogeneidad y se extiende bastante difícil sobre el rostro. Lo podéis observar en la foto de abajo.

Sin embargo a la hora de masajear y exfoliar, es fácil de trabajar y funciona perfectamente como un exfoliante facial. Los granulitos de azúcar rascan la piel lo suficiente, es decir no irritan la piel y no hacen daño, pero realizan perfectamente el trabajo de exfoliación. Al terminar la exfoliación el producto se elimina fácilmente con agua.

En cuanto a los resultados puedo decir que noto mi piel mucho más suave y lisa, más clara y radiante. Además se nota más limpia. La mascarilla no reseca la piel ni la deja tirante. Hay que añadir también que no me ha irritado la piel ni me ha sacado granitos.

La Mascarilla Purificante de Açai tiene un color verde claro y un olor suave y fresco muy agradable. El aroma del producto lo describiría entre un olor frutal y un olor a limpio. La textura del producto es bastante densa y un poco pastosa, típica de las mascarillas de arcilla. Pero se aplica fácilmente y se extiende sobre la piel sin ningún problema. Además se elimina fácilmente con agua.

La mascarilla es del tipo que se seca sobre la piel dificultando un poco la mímica. ;-) En las imágenes de abajo podéis apreciar su textura justo después de su aplicación (izquierda) y después de unos 15 minutos (derecha).

Esta mascarilla la he probado en formato monodosis, así que mi experiencia está basada en un uso. La mascarilla absorbe bastante bien el exceso de grasa que tengo en la zona T, pero sin resecar mis mejillas. Deja la piel con una sensación de limpieza. Además he notado mi piel más clara y con un tono  más unificado, aparte de más suave y lisa.

Al final me gustaría comentar la composición de ambas mascarillas, que me parece bastante buena y respetuosa con la piel. También me ha gustado la idea de que ambas mascarillas estén disponibles tanto en formato monodosis como en formato en tubo. Así podemos probar primero la mascarilla en formato monodosis y si nos convence comprar luego el tubo, que sale más económico. Hay que destacar también la caducidad de 36 meses que no es muy común para este tipo de productos y viene genial.

Y esto es todo por hoy, chicas. ¿Qué os han parecido estas mascarillas? ¿Las conocíais?