¡Hola chicas! ¿Qué tal? En febrero os presenté en mi blog la fantástica fragancia “Yara” de LATTAFA, una marca de perfumes de los Emiratos Árabes Unidos. Os recuerdo que es una fragancia que realmente ha generado mucho revuelo, ha recibido excelentes críticas y es una de las creaciones más deseadas entre los amantes de los aromas gourmet que prefieren una mezcla de notas frutales y matices lácteos. Tengo que admitir que este perfume a mí también me ha sorprendido muy gratamente y además, me recuerda a una de mis fragancias favoritas de los años 90. Y por si esto fuese poco, la reseña de este perfume se ha convertido rápidamente en uno de los posts más leídos en ni blog.
Pues hoy voy a hablar sobre otro perfume de esta marca árabe. Se trata de “Yara Candy”, que aunque es una fragancia un poco menos conocida que “Yara”, a mí personalmente me gusta mucho más. Y además, me parece un perfume perfecto para esta temporada, ya que es cálido y ligeramente dulce.
“Yara Candy” es un perfume lanzado al mercado el 29 de julio de 2024 y se trata de la cuarta fragancia de la gama con la denominación “Yara” de la compañía LATTAFA. Este eau de parfum es una incorporación azucarada a la familia Yara. Elaborado con los mejores ingredientes del corazón de Oriente Medio, “Yara Candy” es una armoniosa mezcla de deliciosas frutas confitadas y exquisito jarabe de vainilla. Este rico aroma es perfecto para quienes aprecian el encanto de una fragancia equilibrada y sofisticada.
La fragancia pertenece a la familia olfativa Floral - Frutal – Gourmand y sus acordes principales son avainillados, frutales, empolvados y cítricos con un toque de flores blancas.
La fragancia comienza con una explosión de jugosas mandarinas verdes (que aportan inmediatamente un toque chispeante al aroma) y grosellas negras (que proporcionan una profundidad y le dan un toque almibarado de frutos rojos, a la vez especiado y dulce). En su corazón encontramos el caramelo efervescente de fresa, dulce y almibarado, así como las notas florales de gardenia, que le añaden a esta fragancia un sutil matiz floral cremoso. La base de "Yara Candy" es suave, agradablemente cálida y cremosa, es decir, es típica para las fragancias de la familia “Yara”. La base combina vainilla y almizcle. Además, para una comodidad perfecta y para un modo otoñal, se ha incluido también el ámbar y el sándalo. Estas notas profundas proporcionan una sensación cálida y sensual, creando un fondo duradero que perdura durante horas.
El frasco de la fragancia tiene el mismo formato original, adorable y sofisticado que todas las demás fragancias de la familia “Yara” de LATTAFA. Solo cambia su color que en el caso de esta fragancia en concreto es de color rosa fucsia bastante potente con detalles dorados. El perfume se vende en un frasco de 100 ml y cuesta aproximadamente unos 25 euros. Lo he comprado en la perfumería Druni.
Mi opinión:
“Yara Candy” de LATTAFA es una explosión de dulzura juguetona con un fondo cálido y envolvente que transforma lo cotidiano en algo encantador. Si os gustan los perfumes golosos, pero con un toque sofisticado, éste podría enamoraros.
Como una de las notas de salida de este perfume es la de grosella negra, sabía incluso sin olerlo que me iba a gustar. Y efectivamente me gusta mucho a pesar de que las fragancias gourmand nunca han sido mis favoritas. Pero las notas de grosella en fragancias me pierden y si un perfume las tiene, siempre me gusta. :-)
Teniendo en cuenta sus notas aromáticas tales como el caramelo de fresa, sin duda es una fragancia bastante dulce y golosa, pero en mi opinión no es un aroma empalagoso, pesado ni agobiante, ya que el aroma dulce está suavizado por las notas florales presentes en este perfume. En mi opinión, su olor no cansa y no es nada molesto. Además, en la composición aromática de este perfume se notan bastante las notas de vainilla que le aportan algo de calidez.
La salida de esta fragancia es chispeante y juvenil, con una mandarina verde que aporta un frescor cítrico inesperado y grosellas negras que le dan ese punto ácido y afrutado que despierta los sentidos. No es una dulzura empalagosa desde el inicio, sino una entrada vibrante, casi efervescente.
A los pocos minutos, el corazón se despliega con el caramelo efervescente de fresa. Es la nota estrella y no decepciona. La gardenia, que es la otra nota de corazón, aparece tímidamente, aportando un matiz floral blanco que equilibra la composición. Aquí es donde el perfume empieza a sentirse más femenino y más coqueto.
Pero lo que realmente me conquistó, fue el secado. La base de “Yara Candy” es cálida, cremosa y reconfortante: vainilla, ámbar, sándalo y almizcle. La vainilla es suave, no invasiva, y se mezcla con el ámbar para crear una estela envolvente, casi adictiva. El sándalo le da cuerpo, y el almizcle lo suaviza todo.
En mi piel, la duración de este perfume es bastante buena: unas 4-5 horas. No es un perfume con una estela prominente, pero sí que deja huella. Lo uso tanto de día como de noche, y aunque tiene un aire juguetón, no lo siento fuera de lugar en una cena elegante. Tiene ese encanto versátil que te hace sentir especial sin esfuerzo. Me lo pongo para ir de compras, para una quedada familiar y creo que siempre queda bien. Eso sí, no es un perfume para quienes buscan algo serio o minimalista. Es para quienes disfrutan de lo dulce, lo femenino, lo divertido. Si os gustan las fragancias gourmand con personalidad, “Yara Candy” es una joya asequible que merece un lugar en vuestro tocador.
El frasco de "Yara Candy" también merece una mención especial. Su diseño es muy original y vistoso, aparte de elegante y sofisticado, y refleja a la perfección el tipo de fragancia que encontramos en su interior. Es un verdadero placer tenerlo en mi colección de perfumes, no solo por su aroma, sino también por su estética.
Y bueno, esto es todo por hoy, chicas. ¿Conocías esta fragancia? ¿La habéis probado? ¿Os gusta tanto como a mí?
Tengo ganas yo de probar alguno de estos, pero es que son super caros..
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